Capitulo dedicado a
Peace ☮ y
VioleLittleCBieberܤ |
Miraba la televisión hasta que
empecé a sentir que algo vibraba, justamente mi celular. Lo tome y conteste.
Al telefono.
-Bueno – dije.
-Linda – dijo Justin con emoción.
-Hola – dije riendo.
-¿Sabes qué hora es? – cuestiono.
-¿Tú no sabes? – pregunte algo extrañada.
-No – dijo – es que estoy en el estudio, trabajando y no tengo ni idea
de que hora sea.
-¿Para qué me llamas? – Cuestione – te meterás en problemas.
-No realmente – dijo riendo – me dieron un descanso y lo quise ocupar
para hablar contigo.
-Aww – dije enternecida.
-¿Entonces? – cuestiono.
-¿Entonces que? – pregunte extrañada.
-¿Saldrás hoy, conmigo? – cuestiono.
-Uy, creo que no – dije – mi ex llamo ayer y pues…
-Ya sé que me etas bromeando – dijo – ye se me tus trucos linda.
-Ya – dije riendo – está bien, saldremos. Pero, ¿A dónde?
-No lo sé – dijo – lo pensare.
-Ok – dije.
-Bueno, me tengo que ir – dijo – te quiero linda.
-Yo también – dije – chau.
-Chau.
Colgué y deje mi teléfono en
donde estaba anteriormente. Seguí mirando la tele pero me aburrí. No sabía qué
hacer, más bien, no tenía nada que hacer. Esta era una de las razones por las
que yo esperaba con ansias entrar a la escuela, el darme tareas, algo que me
mantuviera ocupada.
-¿Estas ocupada? – cuestiono Alejandro
mientras entraba a mi habitación.
-Obviamente no – dije.
-Me alegro porque necesito tu
ayuda – dijo.
-¿Qué necesitas? – cuestione.
-Pues, Nicole cumplirá años
dentro de algunos días y le quiero regalar algo lindo – dijo – pero yo no soy
mujer y no sé que podría regalarle.
-¿Por qué me pides ayuda a mi? –
cuestione – sabes que no nos llevamos bien.
-Lo sé – dijo – pero lo harías
por mí.
-Lo hare – dije.
-Pues vámonos – dijo tomándome
del brazo y levantándome a la fuerza del sillón.
-Pero que conste que lo hare solamente
porque eres mi hermano – dije – y te quiero.
-Hay hermanita – dijo el riendo
– vamos, aun es temprano.
Alejandro me llevo hasta un centro
comercial de Beverly Hills. Fue algo corto el trayecto, solamente unos 20
minutos. Alejandro estaciono su auto muy lejos de la puerta de entrada, según el
por seguridad.
-Vamos flojonasa – dijo riendo.
Bajamos y caminamos juntos
hasta la entrada.
-¿Qué le quieres regalar? –
cuestione.
-Pues, le daría ropa pero no –
dijo – no se me su talla. Mejor le doy algunas joyas.
-¿Joyas? – Cuestione riendo –
yo le daría joyas a alguien en cuanto sepa que es el indicado y no solamente
algo temporal.
-Yo sé lo que hago – dijo.
-Tú sabes – dije – y dime
Romeo, ¿en donde planeas comprar las joyas?
-Hay una tienda por aquí – dijo
– había visto algunas muy lindas pero necesitaba la opinión de una chica.
-Pues veamos – dije.
Me llevo hasta la tienda, por
fuera se veía que era muy lujosa. Sentía que estaba desperdiciando mucho dinero
en ella, no exactamente porque me cayera gorda la tipa, si no porque ellos llevan
saliendo por un mes y algo, aun nada es definitivo entre ellos.
-¿Qué te parecen estos? –
cuestiono señalando unas pulseras.
Simplemente eran hermosas y
caras. Estaban bañadas en oro blanco. Una pulsera de entre todas llamo mi atención
al instante, tenía incrustados diminutos diamantes junto con varios colgantes. Se
veía muy linda.
-Creo que esa es la más linda –
dije señalándola.
-Si tú lo dices – dijo – la llevare.
Mi hermano llamo a una de las
encargadas, le pidió esa pulsera y la compro. Dimos dos vueltas a la plaza para
que el pudiera encontrar algo más. Al final término comprando un anillo, un
reloj y la pulsera http://www.polyvore.com/gift/set?.locale=es&id=53772893,
las tres cosas caras. Después pudimos regresar a casa.
-Ya sé que le regalare – dije.
-¿Qué cosa? – pregunto mi
hermano.
-Un hermoso rosario – dije –
haber si así se le va el demonio que trae dentro.
-Amanda – dijo mi hermano, algo
fastidiado.
-Ya se, ya se – dije –
respétala.
-Así es – dijo riendo.
Bajamos del auto y entramos a
casa. Fui directo a la cocina y me aplaste en una silla. Encendí la televisión
y me puse a ver un noticiero, era lo único bueno. Perris se acerco a mi silla y
empezó a saltar, aparentemente quería que alguien la cargara. La tome y la subí
a mi regazo, le acaricie el pelaje y en instantes se quedo dormida.
Después de un rato se despertó
y se fue. Yo me levante y fui de regreso a mi habitación. Cheque mi celular, el
cual había dejado aquí. Tenía dos llamadas perdidas, una de Justin y la otra de
Cait. Marque su número y después de unos segundos contesto.
Al teléfono.
-Bueno – escuche decir a Justin.
-Hola Bieber – dije.
-Linda – dijo - ¿vendrás conmigo a los bolos?
-Claro – dije extrañada.
-¿No te ha dicho Caitlin? – cuestiono.
-Pues, tengo una llamada perdida suya – dije.
-Te dirá sobre una salida a los bolos – dijo seguro – entonces,
¿vendrás conmigo?
-Oh – dije – pues sí.
-Ok – dijo riendo – paso por ti en una hora.
-Está bien – dije riendo – chau.
-Chau linda.
Colgué y marque el numero de
Cait, tal vez tenía algo más que decirme.
Al teléfono.
-Bueno – dijo Cait al contestar.
-Cait – dije riendo.
-Amanda – dijo riendo – te estaba marcando para ver si nos acompañas a
los bolos.
-Algo me dijo Justin – dije riendo.
-¿Entonces si iras? – cuestiono esperando mi respuesta.
-Yo creo que si – dije.
-Perfecto – dijo con algo de
alegría – tenemos muchas cosas que hablar.
-Así parece – dije riendo.
-Bueno, nos vemos haya – dijo.
-Ok – dije – chau Cait.
-Chau Amanda.
Colgué y puse mi teléfono a
cargar. Ahora que lo pensaba hacia ya mucho tiempo no iba a jugar a los bolos.
Es más, soy pésima para eso, normalmente pierdo o me lastimo. Normalmente solo
hago el ridículo. Aun así tengo la opción de no hacer nada.
Después de un tiempo, Justin
llego. Baje rápidamente para abrir pero Alejandro ya se me había adelantado.
Mientras bajaba me tope con Nicole, ¡emocionante!
-Alejandro – dije asustada – la
perra.
-Ya te dije que no me gusta que
la ofendas – dijo Alejandro mientras me acercaba corriendo.
-No tu perra – dije con enojo –
mi perra.
Salí de casa y fui directo por
mi querida Perris. Ella había dejado de correr y se había acostado en una parte
con césped. La recogí del suelo y la acurruque en mis brazos. Me voltee para
regresar a casa y me encontré con Justin, muy atento a todo.
-Dios santo – dije del susto.
-No soy tan feo – dijo riendo.
-No es eso – dije – es que
pensé que estabas adentro.
-No – dijo Justin – planeaba
ayudarte pero te me adelantaste.
-La intención es la que cuenta
– dije.
-Ya lo creo – dijo riendo –
volvamos.
Coloco una de sus manos en mi
espalda y regresamos a casa. Deje a Perris en el patio y fui hasta la cocina en
donde estaba Justin.
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Holaaaaaaaaaaaaaaaa.... :) hahaha.
Bueno, primero que nada, he aquí el capitulo. Disculpen lo feo que esta, es solo que no tenia mucha inspiración para escribir... Muchas gracias a todas las chicas que leen la novela :) simplemente gracias. El capitulo 31 lo subiré hasta la noche, si es que se me ocurre algo, si no lo subiré mañana :)
Respuesta a comentarios:
-Acabo de recordar algo – dijo
sonriendo.
-¿Qué cosa? – pregunte,
sentándome a un lado de el.
-Hoy termino nuestra apuesta –
dijo poniendo una sonrisa algo picara.
-Que emoción – dije con
tranquilidad.
-No caeré en tus juegos – dijo
mirándome mal, yo solo me limite a reír – y, ¿Quién se supone que gana?
-Empate – dije – yo no te bese
y tú tampoco me has besado.
-Es lo justo – dijo.
Hablamos por unos minutos más
hasta que se llego la hora de irnos. En el camino se la paso diciendo muchas
taradeces. Por más tontas que fueran me hacían reír y por consecuente lo hacían
reír.
-Ya – dije mientras me quitaba
una lágrima – concéntrate en manejar.
-No llores – dijo con un tono
de voz algo chistoso.
-Es tu culpa – dije riendo – tú
y tus cosas.
-Ya me callo – dijo entre
algunas risas.
Después de algún tiempo
llegamos a nuestro destino. Como siempre, Justin se apresuro a abrirme la
puerta, antes que yo lo hiciera. Cerró la puerta y se pego a mí. Paso su brazo
por mi cintura mientras que yo colocaba mi mano en su espalda.
-Hay un pequeño problema – dije
mientras nos acercábamos a la puerta.
-¿Cuál? – pregunto extrañado.
-Digamos que no soy buena para
los bolos – dije.
-No importa – dijo – yo te
ayudare.
-¿Cómo? – cuestione.
-Ya lo veras – dijo sonriendo.
En cuanto estuvimos adentro
fuimos hasta donde estaban los chicos. Justamente estaban Ryan, Chaz, Chris y
Cait. Saludamos a cada uno de ellos y fuimos por nuestros zapatos, los cuales
estaban algo feos.
-Ahora si podremos hablar –
dijo Cait. Los chicos estaban en otra parte separados.
-Por fin – dije riendo.
-Tengo buenas y malas noticias
– dijo Cait - ¿Cuál quieres?
-La mala – dije.
-Nicole estará en nuestro mismo
colegio – dijo Cait.
-¿Y la buena? – pregunte con
disgusto
-La buena es que… es mentira –
dijo mientras reía.
-Por Dios Caitlin – dije – por
un momento pensé que era verdad.
-No – dijo con repulsión –
mejor me callo, no la quiero invocar.
-Mejor – dije riendo - ¿y qué
ha pasado?
-Pues no mucho – dijo ella con
un tono de aburricion – ya sabes como es mi vida.
-Hay Cait – dije riendo –
deberíamos de hacer una fiesta, las dos juntas.
-Si – dijo con emoción, los
demás voltearon a vernos extrañados – invitare a todos tus próximos compañeros,
sirve que los vas conociendo mejor.
-Me parece una buena idea –
dije riendo – pero, ¿Cuándo?
-¿La próxima semana? –
cuestiono, yo asentí con la cabeza - ¿en tu casa o en la mía?
-No lo sé – dije dudosa.
-Hagámosla en la mía – dijo –
mis padres no estarán.
-¿Estás segura? – cuestione.
-Muy segura – dijo – además,
podemos hacer una pijamada.
-Sabes, me agradan tus ideas –
dije.
Seguimos hablando – o más bien
planeando – la fiesta. Fueron solamente unos minutos ya que los chicos empezaban
a molestar para que fuéramos con ellos, a jugar.
-No me quiero poner esos
zapatos – dije mirándolos con algo de asco.
-Te comprendo, son horrorosos –
dijo – no tengo planes de ponérmelos.
-Ni yo – dije riendo.
-Mejor – dijo dejándolos en el
piso – así los dejamos, ¿Quién dice que no podemos jugar sin esos zapatos?
-Creo que.. – dije poniendo los
zapatos en el suelo - ..esta decidió. Chau adefesios.
-Vamos – dijo riendo.
Nos levantamos y fuimos por
nuestra bola (o como la llamen). Tuvimos pequeños problemas a la hora de elegir
el tamaño. Pasamos algunos sustos pero, fue divertido.
-Hasta que por fin – dijo Ryan
mientras nos acercábamos a ellos – se van a resbalar.
-Claro que no – dije.
-El piso es resbaloso – dijo
Ryan – deberán tener cuidado.
-Claro – dijo Cait – lo sabemos.
-Pues, yo digo que empecemos –
dijo Chaz.
-Vamos – dijo Chris.
-Ustedes también vienen – dijo Chaz,
tomándonos de la mano y llevándonos con los demás.
Chaz nos soltó y nosotras nos
fuimos a sentar. Empezamos a platicar de muchas cosas, mayormente de chicos. A
pesar de todo, somos chicas. Así como los hombres hablan de mujeres, nosotras
hablamos de hombres.
-Escuche que corto con su novia
– dijo Cait – créeme, si es así, se ha hecho un favor.
-¿Tan fea era? – cuestione.
-No necesariamente – dijo –
pero era mala, era muy egocéntrica y mandona.
-¿Cómo fue que se fijo en ella?
– cuestione.
-Pues, dicen que ella es muy
zorra – dijo Cait riendo – tal vez por eso.
-Lo más seguro – dije.
-Enserio, ya quiero que
entremos a clases – dijo con emoción – imagínate a las dos juntas en un salón.
-Seremos un caso – dije riendo –
pero uno divertido.
-Ya lo creo – dijo.
Seguimos hablando de lo mismo
por un rato hasta que Ryan fue a interrumpir.
-El chisme para otro día – dijo
Ryan – ahora vengan.
-No – dijo Cait en suplica.
-Estamos bien así – dije.
-No – dijo Ryan – vengan.
Nos tomo del brazo y nos ayudo
a levantarnos. Nos llevo junto con los demás. A veces ellos pueden ser muy
tercos.
-Yo no se jugar – dije mientras
caminábamos.
-No te preocupes, yo tampoco se
jugar – dijo Cait.
-Ahora si – dijo Ryan – aunque sea
estén aquí presentes.
-Claro.
-Linda – dijo Justin tomándome
de la cintura – te toca a ti.
-No – dije – no es broma cuando
digo que no se jugar.
-Ya te dije, yo te ayudare –
dijo.
-¿Cómo? – cuestione.
-Ven – dijo – toma una – dijo señalando
a las bolas de boliche.
-Listo – dije tomando una
rosada, la cual había elegido desde antes.
-Te ayudo – dijo y la tomo con
una mano – has un intento – dijo entregándome la bola en cuanto estuvimos en el
lugar indicado.
-Está bien – dije.
Antes de tirar mire a las demás
persona. Había varios chicos muy buenos a unos carriles de distancia. Uno me
volteo a ver y me sonrió, simplemente le devolví la sonrisa y me voltee, mis
planes no eran conseguir una cita.
-…
- Peace ☮: me alegra mucho que te haya gustado la novela :).... gracias por haberte pasado por la novela :)
- VioleLittleCBieberܤ: haha, creo que ya sabes quien es :P... igual te quiero y muchas gracias por pasarte por la novela :)
Bueno chicas, ya saben, el capitulo 31 lo subiré pronto y espero subir algo mejor. Solo les digo que esta novela va a empezar a tener mas drama dentro de algunos capítulos. Esperen a lo mejor :)
También le agregue dos paginas al blog, en la parte superior. En una puse los personajes mientras que en la otra esta la sinopsis. También estoy pensando en agregarle mas cosas al blog, aunque todavía no lo se.. ya después se irán dando cuenta.
Las amooooo :*
XOXO Andrea<3
sdjfhakjsdhfo oshea :$ primera e_é me encanto el cap ya tan solo leer me imagino tdo bueno seguila besos
ResponderEliminary gracias por dedicarmelo :)
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