Capitulo 11. España (Parte 1)

Tomamos nuestras cosas y salimos del estudio. Subimos a la camioneta y esta nos llevo de regreso al hotel. En todo el camino reino el silencio, un incomodo silencio. Lo único que podíamos escuchar era la radio de la misma camioneta, la cual daba las noticias del día.

En cuanto llegamos bajamos de la camioneta y entramos. A esta hora no había tanta gente afuera como antes. Fue fácil acceder al lobby del hotel.

-Todos a sus habitaciones – dijo Scooter – ya saben, si quieren pueden estar en los alrededores del hotel, nada de salir a la calle.

-Ok – dijimos todos.

No tenía ganas de ir a la habitación por lo que me fui a sentar en la misma recepción.

-Vamos, a dormir – dijo Justin riendo detrás de mí.

-Tonto – dije riendo.

-Vamos, te acompañare – dijo el – no tengo ganas de subir.

-Está bien – dije sin ganas – tendré que soportarte un rato mas.

-Si claro, se que deseas que me quede contigo siempre – dijo el riendo.

-Aja – dije son sarcasmo.

-Ya vamos payasita – dijo el riendo.

Tomamos asiento uno frente al otro. Me sentía bien estando con él, me sentía un poco más libre.

-Sabes, no tuve oportunidad de preguntarte esto antes – empezó diciendo Justin - ¿Qué fue lo que paso en el aeropuerto con Gustavo?

-¿De qué hablas? – pregunte confundida.

-Pues parecía como si ya se llevaran bien – dijo Justin. ¿Qué clase de preguntas son esas?

-Yo no me llevo bien con el – dije – fue por compromiso.

-Si claro – dijo con sarcasmo – lo vas a terminar queriendo, de mi te acuerdas.

-Tal vez – dije.

-Otra pregunta – dijo él.

-¿Acaso me entrevistas o algo parecido? – pregunte riendo.

-Puede ser – dijo riendo.

-Ya dime – dije.

-Pues, yo me pregunto, ¿eres modelo? – pregunto él con algo de pena.

-No – dije extrañada - ¿Por qué lo preguntas?

-Pues, tienes el tipo de modelo – dijo él.

-¿Cómo es el tipo de una modelo? – pregunte curiosa.

-Pues tú sabes – dijo él, al parecer intentaba evitar responderme.

-No, la verdad no se – dije – así que dime, cual es el tipo de una modelo.

-Pues, no sé cómo decirlo – dijo él algo apenado.

-Dime, sin miedo – dije riendo.

-Pues, las modelos son altas, delgadas y bonitas – dijo él. Sentí como mis mejillas tomaban algo de color. ¿Acaso el pensaba que yo era bonita?

-Así que así son las modelos – dije riendo, debía disimular un poco la pena que me daba.

-Normalmente así son – dijo él. Podría decirse que el estaba algo mas apenado que yo - ¿jamás pensaste en modelar? – pregunto él.

-No – dije – nunca. No es algo que llame mucho mi atención, para serte sincera.

-Si pudieras elegir entre algunas “carrera” de Hollywood, ¿Cuál elegirías? – pregunto él.

-Con carrera te refieres a… - dije.

-Pues, no lo sé, canto, actuación, baile, modelaje, no se – dijo él.

-Pues, preferiría modelar – dije riendo – te preguntaría a ti pero sería tonto ya que eres cantante.

-Sí, sería tonto – dijo riendo – sabes, será mejor que subamos o sino Scooter nos mata.

-¿Qué hora es? – pregunte.

-Las 10 de la noche – dijo el – y mañana debemos estar despiertos desde temprano.

-Pues mejor si, subamos – dije.

Caminamos hasta el ascensor y subimos hasta el último piso en donde estaban nuestras habitaciones.

-Buenas noches – dijo Justin antes de entrar.

-Igualmente – dije sonriéndole, acción que el correspondió.

El entro a su habitación, al igual que yo. Cerré la puerta y fui directo a donde yo dormiría.

-Hola cariño – dijo Pattie al notar mi presencia.

-Hola Pattie – dije sonriente.

-Recuerda que mañana debemos estar en el aeropuerto desde antes de las 10 de la mañana – dijo Pattie.

-Está bien – dije – me cambiare.

-Ok – dijo ella – ahí está el baño – dijo señalando a una puerta.

-Gracias – dije.

Tome una de mis pijamas y me metí al baño. Me cambie y tome la ropa que había utilizado. Salí del baño y la guarde. Fui hacia mi cama y me tire sobre ella. Estaba algo cansada, sabiendo que yo no había hecho nada.

-Buenas noches – dijo Pattie.

-Buenas noches – dije.

Al día siguiente…

Mi alarma empezó a sonar, un ruido fuerte y molesto. Abrí mis ojos y tome mi celular. Eran las 8 de la mañana. Desactive mi alarma y me levante de la cama. Mire a todos lados, Pattie ya no estaba, parecía que ya se hubiera levantado. La puerta del baño estaba abierta y las luces estaban apagadas, lo que significaba que no había nadie ahí adentro.

Camine hasta llegar a la cocinita de la habitación. Ahí estaban Pattie y Carin, charlando.

-Buenos días – dijo Pattie sonriéndome.

-Buenos días – dije devolviéndole la sonrisa.

-Aun es temprano – dijo Carin mirando su reloj – tendremos que retirarnos del hotel a eso de las 9 y media.

-Perfecto – dijo Pattie – chicas, hay tres baños, cada una toma uno.

-Ok – dije - ¿Quién tomara cual?

-Pues, yo tomare el de aquella habitación – dijo señalando una habitación – tu puedes tomar la de nuestra habitación y Carin tomara la de su habitación.

-Me parece bien – dijo Carin.

-Bueno pues, me iré a duchar – dije.

Regrese a la habitación y fui directo a mi maleta. Tome algunas prendas y me introduje al baño. Tome una ducha de 20 minutos, no me quise demorar mucho tiempo, por si las dudas. En cuanto termine me cambie por esto http://www.polyvore.com/airport/set?id=48150140. Arregle mi cabello solo un poco. Salí del baño y recogí mi ropa. La deje sobre la maleta y fui a la cocinita.

-¿Ya estas lista? – pregunto Carin algo sorprendida.

-Si – dije riendo.

-Eres rápida – dijo ella – no te molestaría prestarme tantita velocidad – dijo ella riendo – bueno, me iré a arreglar.

-Ok – dije.

Ella se fue y quede sola. Fui hacia el sofá y me senté. Tome el control remoto y empecé a cambiar canales. Deje el televisor en una película. No tenía nada mejor que hacer así que me puse a verla.

Paso una hora, ya eran las 9:20. Pattie y Carin estaban como locas, no encontraban muchas cosas y aun no terminaban. Yo seguía viendo la película y a la vez me atacaba un poco de la risa con ellas dos.

-No puede ser, faltan 10 minutos y aun no termino – dijo Carin.

-Vamos, si podemos – dijo Pattie.

-No encuentro mis zapatos – dijo Carin alarmada.

-Búscalos, deben de estar por aquí – dijo Pattie.

-Los encontré – dijo ella con emoción – ahora si ya estoy lista.

-Ahora solo quedo yo – dijo Pattie.

En cuanto ya todas estuvimos listas tomamos nuestras maletas y bajamos a recepción. No había nadie más que nosotras, seguramente los chicos aun no estaban listos.

-Vengan, tomemos asiento – dijo Carin.

Pattie y yo la seguimos. Tome asiento y tire las cosas al piso. Saque mi celular y empecé a navegar. Le mande algunos mensajes a mi madre para que supiera que aun estaba viva.  Al instante me respondió el típico “qué bueno hijita, diviértete” de toda la vida.

Los chicos bajaron unos diez minutos después. Todos venían medio despiertos, medio dormidos.

-Hare el check-out – dijo Scooter – aquí espérenme.

El se fue a recepción mientras que sus compañeros tomaban asiento.

-Buenos días amiga – dijo Alfredo sentándose a un lado mío.

-Buenos días – dije mirándolo.

-Tengo mucho sueño – dijo en tono de queja.

-Ya lo note – dije riendo – tienes cara que te caerás dormido en cualquier momento.

-Por tu culpa estoy igual que tú – dijo Bieber sentándose frente a nosotros dos.

-No es cierto – dijo Alfredo.

-Claro que si es cierto – dijo el – tú y tu ruido no dejaba dormir.

-No es cierto – dijo Alfredo.

-Como sea, lo hecho esta hecho – dijo Justin.

-Venga, ya vámonos – grito Scooter.

Tome mis cosas del suelo y me levante de mi asiento. Caminamos hasta la salida en donde nos esperaban varias camionetas. Pattie me ayudo con mis cosas y yo con las suyas. Subimos a una de las camionetas y esperamos a que esta arrancara. Solo tardo unos 10 minutos más y salimos con rumbo al aeropuerto.

Logramos llegar al aeropuerto después de 30 minutos estancados en el tráfico. Adentro no había muchas fans, solo unas cuantas pero eso sí, había montones de fotógrafos.

-Habrá que esperar – dijo Alfredo – siempre dejamos que ellos – Scooter y Justin – vayan primero, después iremos nosotros. Los fotógrafos son muy inquietantes.

-Así parece – dije mirándolos.

Parecían como carroñeros, todos peleando por algo de comida. Eran inquietantes para mí, y eso que yo soy solo una chica común y corriente.

-Creo que ya podemos avanzar – dijo Pattie

-Pues vamos – dijo Alfredo.

Comenzamos a caminar con un paso apurado. Solo se sentían los flashes de las cámaras al avanzar, era algo muy estresante, daban ganas de arrancarles la cámara, tirarla al piso y solamente observar cómo se rompe en pedazos.

-Te acostumbraras a ellos – dijo Carin dirigiéndose a mí.

-Ojala – dije.

-Créeme, después de un tiempo ni sentirás que ellos están presentes – dijo ella.

-Eso espero – dije – son muy molestos.

-Lo sé – dijo ella – demasiado molestos. Eso sí, nunca dejes que ellos te afecten.

-Jamás – dije segura.

-Vamos – dijo ella.

Hicimos el papeleo y nos fuimos de ahí. El vuelo saldría en 30 minutos así que debíamos ser rápidos.  Llegamos a la sala de abordaje y tomamos asiento. Aun quedaban 20 minutos para que saliera nuestro vuelo.

Tome mi celular y empecé a jugar con él. Mientras lo hacía me llega un mensaje, justamente de Caitlin. Ella quería saber cómo me estaba llendo aquí, con todos. Claro que yo sabía que ella quería detalles sobre mi y Justin. Mi respuesta fue sencilla, un simple “me está llendo bien” junto con una carita feliz. No le contaría nada sobre lo que yo hable con Justin, arriesgo mucho estando aquí.

Caitlin sabe que a mí me gusta Justin, creo que es de las únicas que lo saben. Ella ha sido una gran persona conmigo sobre eso, me ha ayudado mucho con él, hasta me da esperanzas con él.

-Vamos, tenemos que abordar el avión – dijo Justin mirándome.

-Está bien – dije.

Tome mis cosas y con Justin, abordé el avión. El acomodo seria igual que el de la vez anterior así que me tocaba con Justin y Alfredo detrás de nosotros.

-Sera mejor que te acomodes porque serán 10 horas de vuelo – dijo él.

-10 horas – dije en un suspiro.

-Tranquila, se pasa rápido – dijo él.

-Al menos valdrá la pena – dije.

-Créeme que si – dijo el riendo.

Esas 10 horas fueron las más largas de toda mi vida. Llegamos a eso de las 3 de la mañana, hora española. Estuve un buen rato distraída, si no era hablando con Justin fue hablando con Kenny o Alfredo. Son muy buenas personas, además de graciosas.

Dormí solo 3 horas durante el vuelo, muy poco a comparación de los demás. Llegamos y afuera estaba todo obscuro, salvo por las luces que generaba el mismo aeropuerto, y como no iba a estarlo si apenas eran las 3 de la mañana en España.

Fuimos por nuestro equipaje y una camioneta se encargo de llevarnos a nuestro hotel. Como en nueva york, yo compartiría habitación con Carin y Pattie, excepto que ahora habría 2 personas más dentro del mismo equipo de Justin. En cuanto llegamos a nuestra habitación fui hacia el que sería mi cuarto. Tome una pijama y me fui a cambiar. Deje mi ropa de aquel día en mi maleta y me tire cobre la cama.

7 horas después…

Mi alarma empezó a sonar debajo de mi almohada. Tenía mucho sueño pero debía de despertarme. Abrí mis ojos y separe mi cabeza de la almohada. Mire a todos lados y me encontré con mi compañera de habitación aun dormida. Desactive mi alarma y me tire de nuevo en la cama. Todo estaba en calma, no había ni un solo ruido lo que me indicaba que nadie se había levantado aun. No quería volverme a dormir ya que si lo hacía no me levantaría y tampoco quería mirar televisión ya que levantaría a las demás. No podía hacer nada más que mirar al techo.

Pasaron 20 minutos y por fin la chica al lado mío se despertó. Yo cerré mis ojos para que pareciera que seguía dormida. Solo escuche el ruido que hiso al levantarse y meterse al baño. Abrí mis ojos y me encontré a mi misma sola en la habitación. Tome mi celular y mire la hora, justamente las 10:45 de la mañana. No sabía cuáles eran los planes para hoy pero a considerar que ni Pattie ni Carin se habían despertado aun, no había mucho que hacer.

-Buenos días – dijo la chica saliendo del baño ya cambiada, según lo que yo sabía, ella era una de las estilistas de Justin, una chica de solo 19 años.

-Hola – dije sonriéndole.

-Creo que yo no me he presentado – dijo ella – me llamo Tina.

-Yo me llamo Amanda – dije.

-He escuchado muchas cosas de ti – dijo ella – cosas buenas y todas vienen del mismo Justin.

-¿Enserio? – pregunte extrañada.

-Si – dijo ella sonriéndome – al parecer le agradas, y bastante.

-¿Qué es lo que dice? – pregunte.

-Pues muchas cosas – dijo ella – algunas no te las puedo decir – dijo riendo – pero no te preocupes, todas son buenas.

-Eso espero – dije mirándola divertida. Al parecer era buena - ¿Por qué no estabas en Nueva York? – pregunte.

-Porque no tenía mucho que hacer ahí – dijo ella – lo importante será ahora.

-¿Qué pasara ahora? – pregunte.

-Justin tendrá muchas entrevistas y además participara en unos cuantos festivales – dijo ella – y para eso seré necesaria aquí.

-No sabía que también cantaría – dije – pensé que solo serian entrevistas y ya.

-No – dijo riendo – por ejemplo hoy, el tendrá que participar en su primer festival y tendremos que ir todos.

-¿Qué festival será? – pregunte.

-No sé el nombre – dijo ella – pero es muy importante en esta ciudad.

-¿Sabes a qué hora será? – pregunte.

-Nos iremos de aquí como en dos horas – dijo ella – de aquí iremos al lugar del festival y después al aeropuerto por eso es importante que arreglemos todo antes de irnos.

-Ok – dije – creo que me arreglare de una vez.

-Ok – dijo ella.

Me levante de la cama y fui por mi maleta. Saque algo de ropa y me metí al baño. Tome una relajante ducha de solo unos 20 minutos. Salí y me cambie por esto http://www.polyvore.com/believe/set?id=48422254&.locale=es. Tome la toalla y seque un poco mi cabello. Lo cepille y después Salí del baño. Tina seguía en su cama, tenía su celular en la mano y una gran sonrisa dibujada en su rostro.

-Bajaremos a desayunar – dijo ella - ¿vienes o prefieres quedarte?

-Iré – dije mirándola, ella seguía con su mirada perdida en su celular.

-Perfecto – dijo ella – bajaremos en 10 minutos para que estés lista – dijo guardando su celular, sin dejar de sonreír. 

Fui hasta mi cama y tome mi celular. Lo metí en mi bolso y acomode algunas de mis cosas. Termine y me tire sobre la cama. Tenía muchas ganas de dormir y no despertarme hasta no haber descansado lo suficiente.

-Vámonos – grito Pattie.

Tina y yo fuimos hasta la entrada de la habitación en donde estaba Pattie con Carin y una de las asistentes de Justin. Salimos las 5 y bajamos hasta el restaurante del hotel. Tomamos asiento y ordenamos.

-¿Cuántos años tienes Amanda? – pregunto Carin.

-16 – dije – pero pronto cumpliré 17.

-¿Cuándo? – pregunto Tina mientras bebía su café.

-El 9 de agosto – dije.

-Ya casi – dijo Pattie.

-Si – dije con algo de emoción.

-¿Por qué se mudaron a Los Ángeles? – pregunto Pattie.

-Pues, mi madre y Gustavo se casaron y mi madre pensaba que lo más correcto fuera que nosotros nos mudáramos ya que Gustavo no puede dejar su empleo – dije.

-¿Quién había organizado la boda de tu madre? – Pregunto Pattie – porque estuvo muy hermosa.

-No lo sé – dije intentando recordar – según yo era una amiga de mi mamá pero no recuerdo su nombre.

-Y, ¿Cómo va todo en casa? – pregunto Pattie, supongo que a mí.

-Bien – dije – todo está perfecto.

-Me alegro mucho – dijo Pattie sonriente.

Nuestras ordenes llegaron y se hiso el silencio. Mientras comíamos me hacían una que otra pregunta, todas eran muy normales, cosa que me ponía mas tranquila.

Terminamos nuestro desayuno y regresamos a nuestra habitación. Estaba muy aburrida y no sabía qué hacer. Faltaban solo 40 minutos para irnos del hotel, unos largos 40 minutos. No sabía mucho del que debía hacer. No había nada interesante en mi celular y no tenía muchas ganas de utilizar mi computadora.

-Iré un rato al lobby – dije – llamare a mis padres.

-Está bien – dijo Pattie.

Salí de la habitación y tome el ascensor para bajar. En cuanto estuve ahí fui a sentarme en uno de los sillones, ahí me quede solamente sentada, mirando mi celular, fingiendo que hacia algo para que la gente no me mirara extrañada. Planeaba cumplir lo que le había dicho a Pattie así que marque el numero de mi casa y espere…

Al teléfono.

-Bueno – dijo mi madre al contestar.

-Hola mamá – dije.

-Amanda, que emoción – dijo ella – ¿Cómo te la estas pasando?

-Muy bien – dije tranquila - ¿y ustedes?

-Estamos bien también – dijo ella – Alejandro te extraña mucho.

-No es cierto – escuche como decía Alejandro a lo lejos.

-Claro que si – dijo mi madre – parece estar muy deprimido y eso que apenas se han ido por unos días, nada más.

-Yo también lo extraño – dije riendo.

-Lo se – dijo ella – me alegro que recuerdes que debes llamarme.

-Claro que si mamá – dije – no quiero ser castigada regresando.

-Me alegro – dijo ella – y dime, ¿te estás comportando?

-Claro que si – dije – como siempre.

-No hagas desorden hijita – dijo ella.

-No mamá – dije.

-Bueno, cuídate mucho hija – dijo ella.

-Ustedes también – dije – los quiero.

-Igual – dijo mi madre – chau.

-Chau.

Colgué mi teléfono y lo guarde. Mire a la gente que iba de un lugar a otro, observaba a todas las familias que pasaban, las parejas de novios, a todos. En estos momentos me ponía a pensar en cómo había sido que mi madre termino así, como fue que termino casada más de 4 veces. Tal vez fue lo que paso con mi padre, o tal vez no. Nunca entendería a mi madre, tampoco me gustaría terminar como ella, casada y después de dos años divorciada. ¿Qué significara un esposo para ella? ¿Qué significara la familia para ella?