Capitulo 45. La Curiosidad Mato al Gato

Paso una hora y la película concluyo. Esperamos unos minutos a que salieran todos y después nosotros. Justin payaseo en el camino al estacionamiento con la excusa de que estaba muy emocionado por la idea de tenerme cerca por toda una semana.

-Bájame Justin – dije llena de nervios.

-Ni pesas – dijo.

-Moriremos los dos – dije mientras intentaba hacerlo que me soltara.

-Si te sigues moviendo, yo creo que si – dijo entre risas.

El me llevaba cargada en brazos. Supongo que estar adentro, aburrido y sin poder moverse provoco que saliera su hiperactividad o no sé. Era chistoso pero me daba algo de miedo.

Después de un rato llegamos a casa. Como lo esperaba, mamá ya estaba en casa. Alejandro aun no llegaba y Gustavo tampoco llegaría aun así que solamente seriamos nosotros tres.

-¿Cómo les fue muchachos? – cuestiono mi madre.

-Bien gracias – dijo Justin.

-Me alegro mucho – dijo mi madre – por cierto, Amanda, ¿alguien llamo en la tarde preguntando por ti?

-¿Quién? – cuestione extrañada.

-No lo sé – dijo – no me dijo su nombre.

-Seguramente es una de las chicas – dije – después les respondo la llamada.

-Ok – dijo mi madre.

-Ya regreso, debo hablarle a mi madre – dijo Justin.

-Esta bien – dijo mi madre – si necesitas el teléfono, Amanda te dirá en donde está.

-Ok, gracias – dijo Justin y salió de la cocina.

Mi madre siguió en lo suyo sin darme mucha importancia. Yo me quede ahí, pensando en quien pudo haberme llamado.

-Ya regreso – dije.

-Ok – dijo mi madre.

Salí de la cocina y fui hasta la sala. Tome el teléfono y marque el último número registrado. Espere por unos segundos y contestaron.

Al teléfono

-Bueno – escuche decir a un chico.

-Paul – dije en un tono más cuestiónate.

-Amanda – dijo aliviado – intente llamarte antes pero me dijo tu madre que no estabas.  

-Si – dije entre risas – Salí un rato.

-Oye, quería preguntarte algo – dijo.

-¿Qué cosa? – cuestione.

-Me podrías ayudar mañana con unas cosas de la tarea – cuestiono – y también tengo algunas cosas que contarte.

-¿De qué es? – cuestione curiosa.

-Te dejare con la intriga – dijo mientras reía.

-Mugroso – dije – al menos dime de quien trata o que.

-Es de una chica – dijo.

-Uy – dije riendo - ¿de quién?

-Mañana lo sabrás – dijo – ahorita ya me tengo que ir.

-Que no se te olvide contarme – ordene.

-Recuerda, la curiosidad mato al gato – dijo.

-Adios – dije riendo.

-Chau – dijo y colgó.

Deje el teléfono en la mesa y me levante. Voltee a ver hacia el patio y vi a mi pequeña Perris, encerrada. Fui hasta afuera y la tome en mis brazos. Entre a la casa y regrese a la cocina. Me senté y coloque a Perris frente a mí.

-No quiero que la subas a la barra – ordeno mi madre.

-Te discriminan, mi amor – dije hacia la perrita, ella solo me daba pequeños besitos mientras hablaba. Mi madre me miraba seria, de esas veces en que se pone autoritaria – tranquila, ella no tocara la barra.

-Eso espero – dijo – la última vez Perris dejo todo babeado.

-Eres toda una perris – dije a lo que mi madre rio.

-¿Ya hablaste con tu amigo? – cuestiono mi madre.

-Si – dije.

-Dale de cenar a la perrilla y la regresas afuera – ordeno mi madre.

-Creo que ella dormirá en mi cuarto hoy – dije poniéndola en el piso.

-Espero y no haga sus destrozos – dijo.

-Tu tranquila.

Le deje su comida y ella comió – obviamente. En cuanto termino la tome y fui con ella hasta mi habitación. Le puse su camita y toda la cosa y en cuanto estuvo lista la deje ahí. De inmediato quedo dormida.

-Amanda, ¿estás aquí? – escuche decir a Justin.

-Acá estoy – dije subiendo la voz - ¿Qué paso? – cuestione al notar su expresión.

-Escuche unos ruidos y digamos que me alarme – dijo - ¿Te molesta si paso?

-Para nada – dije riendo  – pasa.

Entro y se sentó en un sillón que había en mi habitación. Recogí algunas cosas del suelo y fui a sentarme junto a él.

-¿Mañana no estarás? – cuestiono Justin.

-Tengo que ir a la escuela – dije con un tono triste.

-Te diría que no fueras pero, eso está mal – dijo.

-Muy mal – corregí y el rió – será mejor que bajemos si no queremos que mi madre piense mal.

-Vamos – dijo riendo. 

...

Desperté temprano, por ahí de las 6 de la mañana. Luche contra mi fatiga hasta lograr levantarme de la cama. Me duche como todos los días y me cambie por esto http://www.polyvore.com/print/set?id=60060208. Me arregle un poco el cabello y tome mi mochila.

-…

_____________________________________________________________

Chicas lose lose, cada vez me tardo mas en subir capítulos y son mas cortos. Yo les juro que hago mi mejor esfuerzo, intento escribir mas pero no sale nada de mi cabezota. No quiero que peinsen mal, yo no dejo la novela pero me cuesta un poco seguirla porque no me llega nada de imaginación. 

Por cierto, bienvenidas a la(s) nueva(s) lectoras, no se cuantas sean o si hay nuevas lectoras siquiera :S comoquiera bienvenidas a las que sean nuevas. 

Intentare hacerlos mas largos, con todo el esfuerzo del mundo mas no prometo mucho. 

Las amooo :)

XOXO Andrea<3